SOBRE ROMERO VERDE

Hemos creado la empresa en la que siempre hemos querido trabajar. Somos dos personas preocupadas por el medioambiente, la alimentación sostenible y el consumo responsable.

Nuestra intención es que este proyecto sea lo más verde y social posible, por eso nunca usamos plástico cuando envíamos la comida a domicilio y solo hacemos delivery en bicicleta, propio o con empresas locales de ciclomensajería, fomentando un servicio de reparto cero emisiones.

Romero Verde es una canción de Lole y Manuel, un grupo de nuevo flamenco de la Sevilla de los años 70. Romero y Romaní, que es "romero" en catalán, son nuestros apellidos, y una excusa para usar esta maravillosa canción. A nuestro primer obrador en Malasaña lo llamamos El Obradoiro en honor a la ciudad de una de las fundadoras. Ahora puedes disfrutar de la comida en nuestro bar restorán ubicado en Chamberí (Calle Gonzalo de Córdoba, 5).

Con nuestra cocina tratamos de hacer que las personas veganas sean felices con diferentes opciones y que los no veganos conozcan las maravillas del plant based.

Recuerda: it's vegan, but you would never know!

Sobre nosotras

SONIA ROMERO - CHEF Y COFUNDADORA

Sonia Romero nació hace unos cuantos años en Huelva. Hizo muchas cosas en su vida y acabó estudiando en la Escuela de Cocina Hofmann en Barcelona. Después de muchos años gestionando caterings, estudió también Dirección en Restauración en la Escuela Superior de Turismo de Barcelona, y decidió que no trabajaría nunca más en un trabajo de oficina vestida con traje de chaqueta. Lo que pasó a continuación te sorprenderá: se le ocurrió la idea de crear Romero Verde. Esta biografía que estás leyendo la ha escrito ella, aunque hable de sí misma en tercera persona. También es la chef en Romero Verde y prueba todo lo que cocina, porque es su único fin en la vida: comer.

CARMEN ROMANÍ - JEFA DE SALA Y COFUNDADORA

Carmen Romaní nació en Santiago de Compostela. Sagitario ascendente acuario y mono de metal en el horóscopo chino, era poco probable que estuviera a gusto toda su vida en una oficina, trabajando en entornos digitales de empresas tecnológicas. Una noche de insomnio tuvo un fuerte deseo: quería trabajar en un sitio acorde a sus principios, donde pudiera ser ella misma y tuviera un contacto real con las personas. Poco tiempo después, Sonia le contó su idea, y en menos de un mes ya estaba en Romero Verde. Tenía dos de las cosas que más le importaban: sostenibilidad y comida muy muy rica. No es que sea una gran creyente de la astrología, pero ha aprovechado que ahora puede poner lo que le apetezca en su bío para describirse misteriosamente.